Cantabría-Santander. 6 días.

El norte siempre atrae, especialmente a los ciudadanos que vivimos en el sur de la península donde la lluvia es escasa y es difícil ver un paisaje verde, bueno en invierno y primavera podemos disfrutarlo brevemente. A parte, disfrutar de un clima suave al menos durante unos días es algo que nos atrae. He visitado Cantabria en varias ocasiones, siempre en verano, primero con mis hijos en una residencia de tiempo libre cerca de la playa del Sardinero, después en un hotel de Suances y por último en una casa rural cercana a Santoña. Si enumero mis visitas es porque en cada momento he descubierto cosas nuevas, aunque he repetido visitas, por ejemplo a Santillana o a Cabárceno.

Playa del Sardinero

Días 1 y 2: La primera propuesta es pasear por el paseo marítimo de la playa del Sardinero, bien por la mañana a primera hora o al atardecer, disfrutar de las vistas a la playa y a esa parte de la ciudad. Si lo hacemos por la mañana podemos acercarnos a la península de la Magdalena, ver la sede de la universidad de verano, pasear bajo los pinos, echar un vistazo a las focas y a las tres naves varadas junto a las que hacerse una foto.

Cortesía de Google.

Podemos seguir la línea de la playa, la de los bikinis y la de los peligros, y llegar al Museo Marítimo del Cantábrico, que merece la pena visitar. Continuaremos siguiendo el mar pasando por el Palacio de Festivales de Cantabria y por el puerto deportivo, hasta llegar al paseo de Pereda, supongo que deberíamos tomar algún refresco o una cerveza y pensar en entrar en las calles anexas para buscar un sitio donde comer, carne de ternera, vaca vieja, rabas, anchoas, marisco y pescado, por ejemplo alrededor de la Plaza Porticada, en la calle Daoiz y Velarde.

Por la tarde continuaremos nuestro paseo caminando hacía el ayuntamiento, la catedral y si hay ganas y fuerzas subir por la Alameda de Oviedo y la Calle San Fernando hasta la plaza Cuatro Caminos. En alguno de los quioscos podemos refrescarnos y descansar bajo las arboledas. Podemos volver en un medio de transporte para ir a descansar a nuestra residencia. Nosotros utilizamos dos días, ya que disfrutamos de un baño en la playa.

Playa desde la Magdalena (ISF).
Palacio de la Magdalena (ISF).
Naos en la Magdalena.
Trainera

Por la noche podemos ir a la zona del parque de Pereda y callejear alrededor del ayuntamiento y la Plaza Porticada.

Día 3. Ruta en coche hasta San Vicente de la Barquera, pasando por Santillana del Mar donde es obligatorio pasar unas horas o toda la mañana. Seguir hasta Comillas y ver sus edificios indianos, y especialmente la obra el Capricho de Gaudí. Seguiremos hasta San Vicente de la Barquera donde disfrutar de la ría y comer marisco en alguno de sus múltiples restaurantes. (Habría que planificar el día para comer en San Vicente de la Barquera y después volver hasta Comillas).

Colegiata de Santillana del Mar.
Iglesia de San Miguel, (Puente Viesgo).
Ria de San Vicente de la Barquera.
Ria de San Vicente de la Barquera.
Cortesía de Google.

Día 4. De nuevo en ruta para visitar la Cueva del Castillo en Puente Viesgo, donde la selección de futbol se concentraba, y por la tarde acercarse a ver el parque de Cabárceno, imprescindible si tenemos hijos, porque es espectacular ver los animales en semi-cautividad: osos, elefantes, jirafas, monos, felinos, hienas,…. Ojo con los monos, con los que puedes interactuar, a mi hijo uno de ellos le tomó manía y quería agredirle, tenía unos diez años.

Mono en Cabárceno.
Elefante en Cabárceno.
Cortesía de Google.

Día 5. Ruta hacía Castro Urdiales. Mi propuesta es visitar por la mañana Liérganes, con sus balnearios de aguas termales, visitados por los reyes, pasear por la villa y seguir hasta Castro Urdiales donde comer pescado. Por la tarde seguir poco a poco por la costa parándonos para contemplar la costa, llegando a las playas de Laredo, y llegando a Santoña donde pasearíamos por sus calles, su muelle y su puerto pesquero, tomar unas cañas y degustar las anchoas. A continuación bañarnos en las playas de Isla y desde ahí dirigirnos a la playa de Somo y llegar de noche a Santander.

Día 6. Visita a los Picos de Europa: Potes y Fuente De. Deberemos dedicar todo el día, salir temprano para llegar a tiempo de coger el teleférico de Fuente De, volver y comer en Potes, un cocido montañés. ¡Ojo!, es obligatorio pasear por sus calles, subir a la torre del Infantado y visitar el Monasterio de Santo Toribio de Liébana. De vuelta a Santander hacerlo despacio a través del desfiladero de la Hermida, si podéis hacer alguna parada, que una vez que se llegue a la costa podremos coger la autovía y plantarnos en Santander en un momento.

Cortesía de Google.

Espero que disfrutéis, quizá sea demasiado intensivo y merece la pena pasar más tiempo, una quincena.