¡¡ Granada !!, capital del reino Nazarí reconquistada por los Reyes Católicos, joya arquitectónica a los pies de Sierra Nevada, que tiene dos espectaculares monumentos la Alhambra y el Generalife dominando sus calles.
Necesitaríamos algunos días para disfrutar de esta urbe andaluza de origen musulmán que como hemos dicho fue la capital del reino Nazarí. De su pasado musulmán tenemos el Palacio de la Alhambra y el Generalife con sus agradables jardines, pero es que las calles que se sitúan frente a este palacio en lo que es el Albarracín y el Sacromonte son un ejemplo de la forma de hacer de sus antiguos moradores, calles estrechas con un suelo de graba armoniosamente creado, empedrado granadino, con sus palacetes o cármenes que encierran casas unifamiliares con su jardín anexo.
A su pasado musulmán hemos de unir todo lo que los cristianos realizaron, una gran catedral renacentista con interior blanco y dorado, famosa por su capilla y cúpula con vidrieras, al lado del Palacio de la Madraza y de la Alcaicería, calles muy estrechas llenas de comercios con recuerdos y productos que recuerdan el pasado morisco.
Si partimos de los Jardines del Triunfo, rodeada de edificios de las administraciones, con el majestuoso edificio del Hospital Real al norte, (actualmente sede del rectorado de la UGR), girando hacía el este llegamos a la Puerta de Elvira, una de las antiguas puertas de la muralla de la ciudad, siguiendo la calle del mismo nombre en dirección sur, en paralelo con la Gran Vía de Colón, tendremos hacía el este las cuestas que llevan al Albaicín, vemos como los marroquíes han recuperado parte de estas calles con sus comercios y teterías, podemos subir por la calle Calderería Nueva hasta la Iglesia de las Esclavas. Volvemos a la calle Elvira hasta desembocar en Plaza Nueva, de donde parte las calles que nos llevan a la Alhambra y al Generalife, Cuesta de Gomérez, y por otro lado la Carrera del Darro que parte de la Iglesia de Santa Ana, alcanzando el Paseo de los Tristes, que corre en paralelo al rio Darro pasando debajo del Palacio de la Alhambra y del de Carlos V, un edificio cristiano que rompe el encanto de estos edificios musulmanes y sus jardines. Si seguimos el Darro llegaremos al Albaicín, con el mirador de San Nicolás y a la derecha la Alhambra, y si continuamos subiendo nos encontraremos con el barrio del Sacromonte, con sus cuevas y sus tablaos flamencos.
Bajando desde Plaza Nueva hacía el suroeste nos encontramos la Plaza de Isabel la Católica, donde convergen la Gran Vía, la Calle Reyes Católicos y la Calle Pavaneras. Si seguimos por la primera encontraremos a los pocos metros y a la izquierda está la Calle Oficios con el Palacio de la Madraza y la Capilla Real. Aquí encontraremos callejones estrechos llenos de tiendas para turistas con productos marroquíes, orfebrería y recuerdos granadinos. Al final de la calle oficios llegamos a la Plaza Alonso Cano que nos da acceso a la entrada de la catedral. Si seguimos por la continuación de la calle Oficios alcanzaremos la concurrida Plaza Bib-Rambla, a partir de la que podemos acceder a las famosas Calle Mesones y Alhóndiga. Siguiendo estas calles podremos disfrutar de la esencia de esta ciudad, alcanzando la Plaza de la Trinidad, pequeña pero con sus grandes árboles y establecimientos de restauración. Cerca se encuentra el edificio de la Facultad de Derecho, la Plaza de la Universidad con su estatua de Carlos V, que sufre las novatadas de los estudiantes. Partiendo de la Catedral por la Calle San Jerónimo también llegamos a esta plaza y a los edificios siguientes en los que se encuentran algunos colegios mayores, la Parroquía de los Santos Mártires, el Santuario de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, el Hospital de San Juan de Dios y la Basílica del mismo nombre. Subiendo por la calle San Juan de Dios podemos volver al Triunfo.
Si a partir de la Plaza de Isabel la Católica seguimos por Reyes Católicos encontraremos a la izquierda la Plaza del Carmen, donde se encuentra el ayuntamiento, y de donde parte la Calle Navas famosa porque está llena de bares y restaurantes, en esta ciudad las cañas también llevan incluida una tapa. Bajando por Reyes Católicos llegamos a Puerta Real de donde parten la calle Recogidas que nos llevaría a la vega y a la zona nueva de la ciudad, con el Camino de Ronda, la Calle Pedro Antonio, famoso lugar donde los jóvenes universitarios disfrutan de fiestas y juergas. Y la Calle Acera del Darro que nos dirigiría hacia el rio Genil y los jardines del Salón. Bueno y la tercera alternativa sería seguir por la calle Pavaneras hasta la plaza del Realejo y de allí a la calle Molinos y al campo del Príncipe.
Son muchas las zonas donde perderse en esta espectacular ciudad, recomiendo subir al Albaicín hasta el Mirador de San Nicolas, acercarse al Sacromonte, mejor de noche para acudir a algún espectáculo flamenco. Visitar la Alhambra y el Generalife, hay que reservar y mejor por internet. También hay que disfrutar de la calle Mesones y sus alrededores, perdiéndonos por esas calles que nos llevarían a sitios muy curiosos.